lunes, 11 de enero de 2010

¿No nos olvidamos de algo?

¿Qué nos está pasando como sociedad? ¿Hace cuántos meses no inscribimos un récord en el libro Guinness? ¿A dónde fue a parar nuestra falta de sentido del ridículo? ¿Y nuestra creatividad para idear los ítems más absurdos? Es por eso que humildemente desde este espacio se lanzan a la consideración pública varias propuestas que podrían ser tomadas en cuenta por las autoridades o instituciones correspondientes. Cada posible nueva marca mundial va con título y una breve reseña que puede ser útil llegado el caso. Como esto es totalmente sin ánimo de lucro, es suficiente con el simple reconocimiento de la autoría, las gracias del caso y un sencillo pase en comisión en el Legislativo.

La rosca de chicharrones más grande
Este es solo un ejemplo de los muchos posibles récords que podemos concretar en materia gastronómica. Es hacer más masa de que costumbre y listo. Eso sí, si es de tardecita mejor, que cae genial con la merienda. Una vez acometido este primer récord se puede continuar con la bola de fraile más grande del mundo, la milanesa napolitana más grande del mundo, el choto más grande del mundo, la pizza a caballo más grande del mundo y todo así, por los siglos de los siglos, berp.

El fondo blanco de Espinillar más prolongado
Considerando que esta bebida alcohólica sólo se toma acá, es un primer premio seguro, al menos la primera vez. Eso sí, antes hay que patentarla bien, no sea cosa que nos comamos los mocos y cuando empiecen a beberla las estrellas de Hollywood aparezca algún gringo que la presente como suya. ¿Si se lo hacen a los indios con las plantas, acaso nos van a perdonar a nosotros?

El partido clásico con más expulsados
Es de notar que en la gresca general del año 2000 quedaron dos o tres en la cancha, así que habría que mejorar la marca, no sea cosa que a los mexicanos se les ocurra superarnos también en este hábito tan nuestro como el asado. Una marca mundial de este tipo sería un gran éxito. Para comprender esto hay que guiarse por la repercusión que tienen escenas similares en el espacio deportivo de los informativos de todo el planeta. Incluso podría servir para promover el turismo internacional ¿Si los españoles tienen sus corridas de toros, por qué no vamos a promocionar los famosos toletoles de nuestros futbolers?

La mayor gresca registrada en un parlamento
Siguiendo el mismo razonamiento que en el caso anterior, este tipo de imágenes suele dar la vuelta al mundo varias veces. Nada de unos golpecitos y alguna que otra puteada. No. Hay que dar un paso más y mostrar que los políticos son gente que tiene sangre y se calienta. Una señora piñata que quede en la retina de todos. Para aumentar la difusión internacional el aparato de prensa del Palacio de las Leyes puede encargarse de subtitular en distintos idiomas los epítetos que se lanzan los oponentes; expresiones tan interesantes como "oligarca puto" y "conchuda". Uruguay: país natural.

La ronda de mate más numerosa
Otra marca mundial que está en la mano (nunca mejor dicho). Sólo nos pueden opacar los países de la región, exceptuando los paraguayos que toman su famoso tereré, mate frío que ya es otra categoría (hay que aclarárselo bien al jurado). Habría que conseguir una panadería auspiciante que ponga los bizcochos, más salados que dulces por supuesto; y cuantos más pan con grasa, mejor.

La gerontodemocracia más vetusta
Habría que sacar cuentas, porque si no aún no tenemos el Poder Ejecutivo con mayor promedio de edad, vamos en camino. Para asegurarse la obtención de este récord habría que promover una discriminación positiva de la tercera edad que aumente su participación en la toma de poderes. Ya lo decía el gaucho argentino más famoso (del mundo de la ficción): el diablo sabe por diablo, pero más sabe por viejo.

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