jueves, 2 de septiembre de 2010

Tormenta de ideas

Un buzón. El obelisco. Un segundo buzón más moderno, tipo plasma o lcd, que esos se venden como churro. Otro de los tantos obeliscos que hay (el de Las Piedras está en la mano, pero tampoco hay que descartar el de Buenos Aires). Un video con los goles celestes del reciente Mundial Sudáfrica 2010. La filmación de un OVNI con forma de bolsa de nylon en el cielo montevideano.
Un mapa para llegar al tesoro de las Masilotti. El tesoro de las Masilotti mismo. Un palco VIP en el futuro estadio de Peñarol con todos los chiches incluídos (con whisky importado, se sobrentiende). El puente Colonia-Buenos Aires, con o sin peajes. La filmación original de la autopia de un extraterrestre made in Roswell. Un yogur de frutilla vencido cualquier 30 de febrero. Un abono mensual para el Tren Fantasma o para los Barquitos Chocadores. La quinta pata del gato. También la sexta si se da la oportunidad. Y la séptima, llegado el caso.
Dos metros de cadena Andebu. Medio kilo de clavos doblados. Un contenedor de martillos de tres golpes. Una bolsa de clavos para vidrio. Curitas sabor bacalao. Una mac hamburguesa de anteayer. Una docena de teclados y mouses de segunda mano comprados en la populosa feria de Piedras Blancas. Un reloj rolex adquirido en la turística localidad paraguaya de Ciudad del Este. El barquito de papel del soldadito de plomo, autografiado por el soldadito en cuestión. Un cargamento de madera sin pata.
Un manual de entrenamiento actualizado para los Fusileros Navales. Una docena de lanchas para Misiones de Paz. Vales de combustible a precio módico. Un pagaré por algún que otro pesito de la ONU. Una grúa cabrestante. Otra grúa. Otra grúa. Un banco de pruebas para motores. Otro banco de pruebas para motores. Un camión con grúa hidráulica. Un cheque para cobrar en alguna sucursal bancaria de un shopping.
La punta de un iceberg. Una careta. Varias caretas. Una carátula nueva. Varias carátulas nuevas. Un pasaporte trucho. Varios pasaportes truchos. Alguna que otra cara de póquer. La última edición del Gallito Luis para buscar laburo como sereno o guardavida. La Guía de Páginas Amarillas para conseguir un buen abogado.
Ante todo lo importante es que no sea por falta de ideas. Todo lo antedicho son varias sugerencias de lo que se le puede vender a la Armada Nacional, dicho esto con el mayor de los respetos pero también con cierto afán de lucro, para qué negarlo, que después los que saben y saben van por ahí afirmando que la iniciativa privada es lo que hace progresar al mundo y quién les quita lo bailado.
Un gran negocio, o un "negoción" -por qué no decirlo así-, puede estar esperándolo ahí nomás, a la vuelta de la esquina. Quietito. Manso. Y usted sonseando frente al televisor siguiendo la nueva moda de las telenovelas chilenas o los culos de turno allende el río. ¡Piense un poco, valor! ¡Titán! ¡Fiera! Téngase fe. Estese alerta. Agudize los sentidos. Dele a su capocha la cafeína suficiente para ver si se inspira.
Sólo hay que disponer de alguna buena ganga; pegarle en el clavo con una oferta apetecible para la clientela potencial que parecería ya está armada hace tiempo... Y dar con el precio, claro.

No hay comentarios:

Publicar un comentario