domingo, 30 de mayo de 2010

Estudio científico avala el consumo de pan con grasa

Un estudio científico realizado por investigadores de la Facultad de Gastronomía de la Universidad de la República demostró que comer 2 ó 3 pan con grasa dos veces por semana favorece el desempeño sexual, laboral, moral e intelectual de las personas.
"Los resultados fueron tan sorpresivos como incuestionables", afirmó el científico Ramón Moglia, responsable del trabajo. Según expresó Moglia el pasado jueves 20 en el marco de la presentación de los resultados de la investigación, "tras un año de estudiar la dieta de medio centenar de personas pudimos concluir que un consumo moderado de pan con grasas es ampliamente positivo para el cuerpo humano".
El estudio consistió en proporcionar a todos los relevados una misma dieta, en la cual la única variante estaba marcada por ingestas diferenciadas del bizcocho en cuestión, variando de cero en todo un año a una docena con el desayuno y otra con la merienda. Tomando en cuenta este consumo, posteriormente se analizó el desempeño diario de cada persona en sus diversas actividades.
"Quedó demostrado que todos los extremos son malos", explicó Moglia a este medio. "En la gráfica que realizamos para observar cómo influye la ingesta de pan con grasas en los individuos se puede observar claramente que tanto los que no comieron ninguno en todo el período de estudio, como los que comieron en mayor cantidad, presentaron los peores resultados".
Consultado sobre cuál era el valor recomendado de consumo, el catedrático sostuvo que "2 ó 3 cañoncitos un par de veces a la semana parece ser lo correcto". Las ventajas son notorias. "Con ese volumen de consumo prácticamente no existe el ausentismo laboral, la inapetencia sexual, la impuntualidad, las faltas de ortografía, el pago de coimas, la reventa de entradas, el hábito de ver La Hora de los Deportes o la compra de alfajores de nieve", comentó Moglia.
Otra conclusión que aporta el estudio de marras, es que la falta o carencia de sal en los pan con grasa, a pesar de ser bueno para la presión arterial, es "altamente contraproducente", pues "altera negativamente el estado de ánimo en cuestión de segundos".
Esta novedosa investigación fue costeada por la Asociación Amigos del Pan con Grasa, una organización civil creada a fines de 2008 y que tiene como objetivo promover el consumo del tradicional bizcocho también conocido como cañón, cañoncito o cuernito.
En pro de su objetivo, la Asociación Amigos del Pan con Grasa, también tiene entre sus planes promover El día del Pan con Grasa, en fecha aún a definir y realizar el pan con grasa más grande del mundo para entrar en el Guinness de los Records.
Por otra parte está casi pronta la elaboración de un libro titulado Mi reino por un cañoncito, donde se cuenta la historia de este tradicional bizcocho salado, tan apreciado entre los uruguayos a la hora de acompañar el mate, el café, la cocoa o la grapa con limón.
El libro contará con un original recetario de exquisitas variedades de pan con grasa. Entre estos se destacan el de chicharrón, el dietético (más chico que el normal), el tropical (relleno de ananá y kiwi en fruto seco), el fraybentino (relleno de corned beef), el italiano (con parmesano y longaniza), el judío (con un recorte decorativo en la parte superior), el cabeza de tortuga (con espinaca) y el cuernito criollo (con chimichurri y chinchulines).

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